| Capítulo 10 |
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¡AY de los que establecen leyes injustas, y determinando prescriben tiranía, |
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Por apartar del juicio á los pobres, y por quitar el derecho á los afligidos de mi pueblo; por despojar las viudas, y robar los huérfanos! |
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¿Y qué haréis en el día de la visitación? ¿y á quién os acogeréis que os ayude, cuando viniere de lejos el asolamiento? ¿y en dónde dejaréis vuestra gloria? |
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Sin mí se inclinarán entre los presos, y entre los muertos caerán. Ni con todo esto ha cesado su furor, antes todavía extendida su mano. |
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Oh Assur, vara y bastón de mi furor: en su mano he puesto mi ira. |
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Mandaréle contra una gente fementida, y sobre el pueblo de mi ira le enviaré, para que quite despojos, y arrebate presa, y que lo ponga á ser hollado como lodo de las calles. |
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Aunque él no lo pensará así, ni su corazón lo imaginará de esta manera; sino que su pensamiento será desarraigar y cortar gentes no pocas. |
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Porque él dice: Mis príncipes ¿no son todos reyes? |
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¿No es Calno como Carchêmis, Hamath como Arphad, y Samaria como Damasco? |
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Como halló mi mano los reinos de los ídolos, siendo sus imágenes más que Jerusalem y Samaria; |
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Como hice á Samaria y á sus ídolos, ¿no haré también así á Jerusalem y á sus ídolos? |
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Mas acontecerá que después que el Señor hubiere acabado toda su obra en el monte de Sión, y en Jerusalem, visitaré sobre el fruto de la soberbia del corazón del rey de Asiria, y sobre la gloria de la altivez de sus ojos. |
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Porque dijo: Con la fortaleza de mi mano lo he hecho, y con mi sabiduría; porque he sido prudente: y quité los términos de los pueblos, y saqué sus tesoros, y derribé como valientes los que estaban sentados: |
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Y halló mi mano como nido las riquezas de los pueblos; y como se cogen los huevos dejados, así me apoderé yo de toda la tierra; y no hubo quien moviese ala, ó abriese boca y graznase. |
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¿Gloriaráse el hacha contra el que con ella corta? ¿se ensoberbecerá la sierra contra el que la mueve? como si el bordón se levantase contra los que lo levantan; como si se levantase la vara: ¿no es leño? |
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Por tanto el Señor Jehová de los ejércitos enviará flaqueza sobre sus gordos; y debajo de su gloria encenderá encendimiento, como ardor de fuego. |
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Y la luz de Israel será por fuego, y su Santo por llama que abrase y consuma en un día sus cardos y sus espinas. |
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La gloria de su bosque y de su campo fértil consumirá, desde el alma hasta la carne: y vendrá á ser como abanderado en derrota. |
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Y los árboles que quedaren en su bosque, serán en número que un niño los pueda contar. |
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Y acontecerá en aquel tiempo, que los que hubieren quedado de Israel, y los que hubieren quedado de la casa de Jacob, nunca más estriben sobre el que los hirió; sino que se apoyarán con verdad en Jehová Santo de Israel. |
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Las reliquias se convertirán, las reliquias de Jacob, al Dios fuerte. |
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Porque si tu pueblo, oh Israel, fuere como las arenas de la mar, las reliquias de él se convertirán: la destrucción acordada rebosará justicia. |
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Pues el Señor Jehová de los ejércitos hará consumación y fenecimiento en medio de la tierra. |
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Por tanto el Señor Jehová de los ejércitos dice así: Pueblo mío, morador de Sión, no temas de Assur. Con vara te herirá, y contra ti alzará su palo, á la manera de Egipto: |
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Mas de aquí á muy poco tiempo, se acabará el furor y mi enojo, para fenecimiento de ellos. |
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Y levantará Jehová de los ejércitos azote contra él, cual la matanza de Madián en la peña de Oreb: y alzará su vara sobre la mar, según hizo por la vía de Egipto. |
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Y acaecerá en aquel tiempo, que su carga será quitada de tu hombro, y su yugo de tu cerviz, y el yugo se empodrecerá por causa de la unción. |
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Vino hasta Ajad, pasó hasta Migrón; en Michmas contará su ejército: |
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Pasaron el vado; alojaron en Geba: Ramá tembló; Gabaa de Saúl huyó. |
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Grita en alta voz, hija de Galim; haz que se oiga hacia Lais, pobrecilla Anathoth. |
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Madmena se alborotó: los moradores de Gebim se juntarán. |
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Aún vendrá día cuando reposará en Nob: alzará su mano al monte de la hija de Sión, al collado de Jerusalem. |
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He aquí el Señor Jehová de los ejércitos desgajará el ramo con fortaleza: y los de grande altura serán cortados, y los altos serán humillados. |
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Y cortará con hierro la espesura del bosque, y el Líbano caerá con fortaleza. |